Título: El que susurra.
Autor: Malenka Ramos.
Editorial: EDICIONES B.
Páginas: 512.
ISBN-13: 9788466663359.
Enlace: Amazon, Casa del
libro.
Sinopsis:
Penny murió a las tres de la mañana. En ese momento, el viejo reloj del pasillo se paró en casa de las hermanas Morelli, la noche se volvió más oscura y la señora Owens oyó que alguien llamaba a su puerta.
A la misma hora, el sheriff observaba con atención el viejo aserradero de Bridal Veil. Había visto una pequeña luz en uno de los cristales rotos, pero no estaba seguro. Aquella noche no era capaz de conciliar el sueño.
Y no muy lejos de allí, en una cabaña recién alquilada, el escritor Jim Allen dormía plácidamente, como casi todos los demás. Por eso no vio la figura alargada y oscura que pasó muy cerca de su ventana.
Algo había cambiado esa noche en el pueblo de Point Spirit. Algo que iba a perturbar sus vidas aunque ellos aún no lo supieran.
Sí. Penny había muerto. Justo a las tres de la
mañana. Cuando todo comenzó.
Nota personal:
Esta es una de las reseñas más complicadas a las que me he enfrentado. La he tenido que reescribir dos veces, porque creo que hay una norma al tomar decisiones y esta es que no se toman decisiones estando enfadado. La escribía y la dejaba reposar, pasado unos días la volvía a leer y rectificaba, hasta que creo que ya no quedan partes movidas por el enfado. Para mí lo importante es hacer una reseña lo más sincera posible, para respetar a los que paséis por aquí para saber de qué va este libro. Dicho esto, paso a la reseña.
Opinión personal:
La historia está ambientada en Point Spirit, un pueblo rural pequeño de Estados Unidos. Esta está contada por un narrador omnisciente, con abundante dialogo y un estilo muy visual, como el que usaría S. King. Tiene un buen uso del lenguaje, me encanta encontrar palabras que no conozco y al buscarlas descubrir que encajan a la perfección en el contexto donde se utiliza.
El libro está estructurado por 56 capítulos
relativamente cortos, divididos en tres partes que son “hola”, “Danzad
malditos” y “cruce de caminos”. Este libro empezó francamente bien, me hacía
leer hasta alta horas de la noche, incluso lograba ponerme los vellos de punta
(cosa que hace tiempo no me pasaba), francamente lo estaba disfrutando, hasta que
acabó la primera parte. A partir de este punto entro en juego la parte
“romántica” del libro, lo digo entre comillas porque a mí más que encandilarme,
me provocó primero estupor y luego ira; y al llegar a la tercera parte estuve a
punto de dejar de leer el libro, porque la autora no paraba de introducir
situaciones “románticas” que no venían a cuento y para mi gusto no aportaban
nada a la historia, al contrario, la desmejoraban y mucho. No creo en la
censura, pero si creo en la coherencia al escribir, leo terror, novela
negra, ficción y a veces romántica, así que tengo asumido que, en un libro,
puede aparecer la muerte de un niño, un asesinato, una violación, pederastia,
relaciones complicadas o hechos sobrenaturales; pero para mi no deben ser algo
gratuito, sino algo que aporte sentido a la narración, en caso contrario, al
estar fuera de contexto, hace más daño que beneficio a la historia.
Para mí, los personajes son demasiado estereotipados, a todos se les puede poner un “muy” por delante, un escritor muy escritor, un reverendo muy reverendo, un médico muy médico, un sheriff muy sheriff, etc.., no he logrado empatizar con nadie. Eso sí, ha logrado que me cabree mucho con ellos y su forma de actuar. Un libro que para mi gusto va decayendo con cada giro de argumento, hasta que la autora le da la puntilla con el giro de argumento del final.
De Malenka Ramos se dice que escribe como Stephen
King, y es verdad, tiene una forma de escribir muy visual y muy detallista. Lo
que no esperaba es que adoptase también la mentalidad de un hombre heterosexual
blanco de 73 años; había escogido su libro porque las mujeres suelen darles un
mejor enfoque a las situaciones sentimentales, pero he encontrado más de lo
mismo (miento, los hombres saben que hay cosas que no se deben escribir, pero
por lo visto ella al imitarlos no ha sabido encontrar ese límite, en temas
sentimentales). Creo que ha tratado de ser transgresora y ha introducido
situaciones que claramente sobraban, que, si las hubiera omitido o cambiado, la
historia hubiese ganado muchos enteros.
He detectado que la autora en el fondo quiere un final feliz, así que se dedica a hacer parejas durante toda la novela, a que cada acción provoque que las personas que se quieren se acerquen más y no tengan secretos entre sí, creando una atmosfera de amor subyacente que a mí personalmente lo que ha provocado es que la historia chirríe. Ya que hablamos de historia y final, a partir del primer tercio esta entró en una espiral de situaciones sin sentido que cada vez daba menos miedo y tenía más “situaciones de amor” lo que provocaba que no entendiese donde quería llegar, hasta que llegó al final feliz (y eso sí que me dio miedo).
En conclusión: Es un libro muy visual, bien escrito, con un lenguaje que me ha encantado, que comienza francamente bien, y que me provocó miedo, aunque más miedo me dio los dos últimos tercios y no precisamente del que me gusta. Un libro que va decayendo cuanto más profundiza en la historia. Con cada giro de argumento va decayendo.
¿Conocéis a la autora o el libro? ¿Habéis sentido
lo mismo que yo con alguno de sus libros? Yo este no lo he disfrutado.
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